La vida honjok proporciona un antídoto y un alivio del contacto con un mundo hiperacelerado que habitamos. Aceptar los actos de soledad tiene como ventaja la obtención de una mayor profundidad mental y ofrece un buen número de otros beneficios: un respiro, autonomia para la toma de decisiones y la opción de hacer lo que te apetece. El placer del individualismo es la fuerza motriz del estilo de vida Hojnok
En solitario
El tiempo a solas ofrece la oportunidad de centrarse en el ahora, se presta más atención a lo que haces y a tu entorno al no ser interrumpidos por distracciones. Puedes centrarte en saborear la comida o disfrutar del paseo.
El honjok no supone solo quedarse en casa, sino en participar en solitario de actividades, ya sea salir a tomar una copa o cenar, ir al cine o viajar. Tienes libertad de ir y hacer lo que deseas sin tener en cuenta los deseos o requisitos de los demás.
El Fomo ( Fear of missing out o miedo a perderse algo) muy habitual en la etapa de la adolescencia es sustituido por el JOMO (Joing of missing out o alegría de perderse algo): Es cuando nos sentimos contentos cuando un evento social no se realiza, o decidimos no ir y pasar un tiempo a solas.
El disfrute de la autenticidad
Además de la libertad de autonomía y capacidad de decisión, el honjok te da la libertad de ser tu mismo. Podemos estar en calma y apoyarnos en quienes somos. sin juicios de por medio. De este modo la soledad genera un sentido de aceptación y amor por uno mismo.
Tiempo para uno mismo
La vida social se ha convertido en momentos en que lejos de sintonizar con otros ,lo que ocurre, es que nos alejamos de los demás, actuando en función del rol que creemos pertoca hacer. Y prestamos atención a eliminar del listado todas las tareas pendientes por hacer. Por ello, la vida honjok te da tiempo para reducir la velocidad y para entrar en pausa y serenidad. Se pueden realizar actividades placenteras como el dibujo, la lectura o la música, no hacer nada y honrar nuestros pensamientos y sentimientos.
Crear rituales de autocuidado
Escúchate y pregúntate, ¿qué necesito hoy? opta para nutrirte en lugar de anestesiarte y haz de tu cuidado algo recurrente. Crea un espacio de serenidad en el que escucharte profundamente.¿Que elementos podrian ayudarte a saborear mejor el tiempo a solas? ¿un rincón en una habitación tranquila, un sofa cómodo, y una infusión? ¿Un banco bajo un árbol? ¿Un cuaderno para dibujar o colorear mandalas? ¿un diario?
Rituales de autocuidado
Un baño relajante con aceites esenciales o una ducha refrescante.
Caminar por el campo o nadar a primera hora de la mañana.
Leer y relajarse en lugar de engancharse a Netflix.
Dedicarse al ocio creativo: escribir, pintar, hacer manualidades, tejer.
Echar la siesta o bailar según el nivel de energía que tengas en ese momento.
Realizar una lista de todo lo que te gusta hacer. A mi me encanta hacer listas (es una tarea muy aspie).
Escribir en tu diario.
Meditar.
En invierno preparar una infusión, envolverte en una manta, encender una vela, y estar a solas con tus pensamientos.
Autoreflexión y llevar un diario
Redactar otorga mucho poder personal, permite procesar emociones, cumplir objetivos, aumentar la conciencia de uno mismo y mejorar la inteligencia emocional.
Escribir un diario permite situar las cosas en perspectiva, ordena ideas y favorece la resolución de problemas. Contribuye a prestar más atención a lo que ocurre cada día. Es un tiempo productivo, positivo y terapéutico.
Seguir el consejo de Julia Camerón en su popular libro el camino del artista. Al acabar de despertar escribe tres páginas, dejate llevar, no censures ni valores, deja que fluyan las palabras. Es un catalizador para realizar cambios, para identificar patrones de comportamiento.
Escribe como te gustaría que fuera tu vida al cabo de determinado tiempo, seis meses, un año. Diseña un plan pensando que pasos puedes dar en esa dirección.
Una lista de agradecimientos. Dejar constancía de aquello que agradeces te ayuda a centrar la atención en lo que se tiene en lugar de focalizar lo que se desea. Anota con quien estás agradecido y por que razón.
Escribe una lista de todos los logros que has conseguido. Leer esa lista en momentos de tristeza facilita animarse.
Una carta de agradecimiento o de disculpa, no es necesario enviarla, pero ayuda a sentirte mejor al respecto lo sucedido en el pasado.
Meditación
Meditar mejora los niveles de concentración y atención, reduce los niveles de ansiedad y estrés.
Busca un espacio tranquilo, pon una alarma en el móvil para al cabo de diez minutos. Puedes estar sentado con la espalda apoyada a la pared o tumbarte. Inspira ,por la nariz, mientras cuentas hasta cinco y expiras, por la boca, mientras cuentas hasta seis. Atiende como la respiración entra y sale de tu cuerpo, como llega al abdomen y asciende y desciende. Si tu mente divaga vuelve a concentrarte en la respiración. Ayudarte de un elemento externo como la llama de una vela ayuda a que la mente se centre. Al finalizar date las gracias por haber cuidado de ti mismo.
Existen meditaciones guiadas en aplicaciones como Insight timer o Headspace. Escucha las palabras que guian tu atención mientras respiras profundamente,
Investigadores de la universidad de Hardvard han demostrado que la meditación puede alterar de forma positiva la estructura del cerebro, aumentando el grosor cortical del hipocampo que es el area que se encarga de la memoria y el aprendizaje.
Comer solo
Comer está considerada una actividad comunitaria, una forma de forjar vinculos con los amigos o la familia. Así que comer a solas se ha tendido a evitar, era como una muestra de soledad, de no ser capaz de atraer compañía.
En los últimos tres años muchas plataformas de reservas online han experimentado un crecimiento importante de solicitudes para comer solo, de modo que muchos sienten que comer solo está más aceptado que hace unos años. Honbap significa comer solo y Honsul beber solo en coreano. Los establecimientos ofrecen espacios íntimos y en los que se puede recargar el móvil. Se sirven menús especiales adaptados a una persona. Comer solo sin mirar pantallas en compañía de los propios pensamientos es muy satisfactorio. Las distracciones desconectan la comida del cuerpo y nos hacen menos capaces de saber cuando estamos saciados.
Comer consciente
Pon la mesa, prepara una buena comida, para nada que tengas el plato en el regazo mientras miras la televisión. Puedes encender una vela, poner una decoración que te guste, algo que celebra el esfuerzo dedicado a una comida contigo mismo.
Presta atención a como estás comiendo. Puedes saborear mejos la comida si masticas despacio. Fijate en las texturas, los sabores, los colores de los alimentos. El plato lleno de comida ha de resultar bonito, colorido.
Observa que efecto tiene la comida en tu cuerpo ¿Te proporciona energía, vitalidad y capacidad de concentración o te nubla, te cansa, te aletarga? ¿Comes por hambre o para aplacar la ansiedad? Las emociones afectan la manera de comer.
Haz pequeñas pausas, de vez en cuando deja los cubiertos encima del plato, respira, vuelve a comer. Te sentirás saciado con menos cantidad de comida. La señal de que estamos saciados llega al cerebro lentamente, al hacer pausas sintonizamos la sensación de plenitud del estomago con la de saciedad que comunica tu mente.
Algunas propuestas
Sal a pasear solo y sin el móvil.
Ve solo a una cafetería una vez por semana.
Construye a partir de lo interior. Empieza por ir al cine o al teatro solo, ve a un retiro de mindfullness o meditación. Atrévete a viajar solo.
Aprecia el tiempo a solas, disfruta del lugar donde estes, observa, escucha, haz fotos de lo que encuentres interesante. Muchas veces fotografío cuadros del escaparate de dos galerias de arte cercanas a casa, también objetos bonitos expuestos en la tienda de delicatessen o de te.
Invierte en tu propio bienestar. Eso es lo que nos ofrece la calma, haz de la solitud una prioridad no algo que puede esperar. Descubre que actividades te hacen feliz, que te permite ser tu mismo y que te aprecies y te valoren por tu singularidad.
Una temporada de solitud y aislamiento hace que la oruga obtenga sus alas. Recuerda esto la próxima vez que te sientas sola Mandy Hale
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