Hay cuatro etapas cuando vas a un emplo te las explico una a una, en cada una de ellas ejerces un rol distinto.
Has superado el proceso de selección y estás muy agradecido, todo lo que la empresa hace te parece interesante y motivador. Solo detectas gente maja. Sientes que tienes mucho que aportar. Y no te importa hacer horas extras no remuneradas.
Segunda etapa: Trabajador Insatisfecho Pasivo
Has detectado que la empresa tiene cosillas que no te gustan. El jefe tiene mucho ego y no siempre escucha o aplica lo que propones. Algún compañero te parece realmente pesadísimo. Deja de apetecerte estar más tiempo del necesario trabajando.
Tercera etapa: Trabajador Insatisfecho activo. El rol del pescador.
Es un personaje que has de evitar establecer relación con él. E intenta no acabar ejerciendo ese rol, ya que al igual que las emociones se contagian, las actitudes, la manera en que eligimos comportarnos, tambien se contagían.
El rol del trabajador pescador es una persona que te dice mensajes de desánimo, como las siguientes:
"No te tomes tan en serio el trabajo, tu le pones muchas ganas, pero es que después no te lo agradecerán"
"Oye, me recuerdas tanto a como era yo cuando me contrataron. Hazme caso, no vale la pena tanto esfuerzo, te lo digo yo que lo he vivido"
Este tipo de empleado lo llamamos el pescador porque siempre está intentando ampliar (mediante su táctica de pesca) el grupo de personas insatisfechas, que critican, que se quejan, pero que no buscan soluciones. Te lo vas a encontrar en acción en espacios informales: en la màquina del cafe, en el lavabo. Genera que el ambiente laboral sea tóxico.
Cuarta etapa:
El trabajador satisfecho pasivo. Tiene asumido que lo que hace o no hace en su empleo no tiene importancia. No siente nínguna motivación por lo que realiza.
Lo hace por que no le queda otra. Pero en realidad prefiere enviar mensajes de email o whatts App a sus amigos que intentar adelantar sus tareas. Con su intención de escaquearse todo lo posible de su labor puede acabar padeciendo Bouredout, del que hablamos en una entrada anterior.
Va al trabajo, sólo, para que no deje de entrar dinero en su cuenta bancaría al finalizar el mes.
Puede que ya has transitado por estos roles. En mi opinión el equilibrio consiste en ser un trabajador insatisfecho pasivo, nínguna empresa es perfecta, en todas las organizaciones hay cosas a mejorar.
Te recomendamos que distingas las cosas que puedes cambiar de las que no puedes hacer nada. En las que puedas cambiar actua de manera asertiva en el momento apropiado. Las que no puedas cambiar tendrás que resignarte: Ser tolerante, ser flexible.
Por último una frase que me dijó un sindicalista cuando yo tenía veintipocos años y llevaba relativamente poco tiempo en el mundo laboral.
Si vas a ver al jefe porque hay un problema lleva contigo la propuesta de solución porque, sin propuesta de solución entonces el problema serás tu.
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